El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) recuerda la importancia de vigilar y revisar continuamente el cuero cabelludo de los menores para evitar el contagio de piojos y liendres que proliferan en la época de calor
El contagio de estos parásitos es muy fácil y rápido y nada tiene que ver con el hecho de que “una persona se bañe o no”, debido a que es más fácil su infección en “cabezas limpias”, siendo un punto clave de proliferación las escuelas de nivel básico, explicó el Seguro Social delegación Guerrero.
La doctora de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) N° 9 del IMSS, Beatriz Hernández Wences, comentó que no es recomendable el uso de remedios caseros, pero si se requiere una supervisión y revisión adecuada del cuero cabelludo, así como lavado continuo de sabanas, almohadas, toallas, gorras, adornos y cepillos de cabello, ya que son lugares donde se depositan los huevecillos de las liendres.
Comentó que se tiene la creencia que el piojo “vuela” para lograr el contagio, pero no es así, éste ocurre de manera directa, al juntar las cabezas o intercambiar artículos personales.
Indicó que es recurrente que la infección ocurra en menores de cinco a 15 años de edad y en adultos pero en mínima proporción. Destacó que para sobrevivir, los piojos necesitan (en todas sus formas de evolución) de la sangre humana y la falta de ésta causa su muerte en las siguientes 24 horas.
Indicó que la principal manifestación de esta enfermedad es la comezón constante del cuero cabelludo de forma intensa y recurrente en diversas partes de la cabeza. Con la aparición de los primeros síntomas, insistió en su recomendación en acudir con el médico familiar, quien otorgará el tratamiento adecuado a la persona con el padecimiento