Como Gobernador de Guerrero, he mantenido el firme compromiso con la verdad, la justicia y el respeto irrestricto a los derechos humanos para resolver los problemas de violencia que aquejan a nuestro Estado.
Hoy se cumplen cinco años del mayor daño que haya sufrido Guerrero en los últimos tiempos: la desaparición de 43 jóvenes guerrerenses de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa “Raúl Isidro Burgos”.
Como mexicano y como
guerrerense, comparto el dolor, la indignación y la exigencia de verdad y
justicia de los padres y madres de los 43 normalistas, quienes viven la
desesperación y la incertidumbre de no saber sobre el paradero de sus hijos.
A cinco años de la tragedia, no
hay aún respuestas claras y veraces sobre la desaparición forzada de los 43
estudiantes ni de los homicidios y agresiones cometidos el 26 de septiembre del
2014 en la ciudad de Iguala.
Sin embargo, la actual
administración federal encabezada por el Lic. Andrés Manuel López Obrador, ha dado
pasos firmes para marcar el inicio de una nueva etapa para esclarecer estos
lamentables hechos.
Uno de ellos, ha sido la
creación e instalación de la Comisión Presidencial para la Verdad y el Acceso a
la Justicia en el caso Ayotzinapa, con el fin de encontrar lo que realmente
ocurrió hace cinco años y poner a los responsables de estos hechos a
disposición de la justicia.
Igualmente, debe atenderse a
fondo la dignidad del joven deportista David Josué García Evangelista, del
operador del autobús, Víctor Manuel Lugo Ortiz, integrantes del club de fútbol
Los Avispones de Chilpancingo, así como de la señora Blanca Montiel Sánchez, a
quienes se les privó de la vida de manera cobarde y alevosa.
Exigimos que se investigue a los
jueces que han liberado a delincuentes. Las pruebas las pueden encontrar en los
homicidios narrados reiteradamente en los que se incluye jóvenes estudiantes de
Ayotzinapa.
Asimismo, hacemos patente la
total disposición del gobierno del Estado para colaborar a plenitud en la
urgente labor de conocer la verdad y hacer justicia.
México no merece que la tragedia
de los 43 sea un caso más de impunidad y de injusticia.
Mientras no se dé con el
paradero de los 43 normalistas, México y Guerrero seguirán con una herida
latente.
Lo hemos dicho desde el
principio y lo reiteramos sobre los homicidios acontecidos hace 5 años el 26 de
septiembre y en la desaparición de los 43 estudiantes de la escuela normal
rural, Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa: NI PERDÓN NI OLVIDO